Totò, de nombre real Antonio De Curtis, nació en Nápoles, Italia, en 15 de febrero de 1898. Desde joven, mostró su habilidad para la comedia y la actuación en teatro y cine. Se especializó en papeles cómicos y, a lo largo de su carrera, trabajó con algunos de los artistas más grandes de la época, incluyendo a Federico Fellini y Vittorio De Sica. Totò también era conocido por su capacidad para improvisar y su versatilidad como actor. Interpretó una amplia gama de personajes, desde los más cómicos y estrafalarios hasta los más dramáticos y emotivos. Aunque a menudo se le considera uno de los mejores actores cómicos de todos los tiempos, también recibió críticas por su vinculación con la mafia suditaliana, que supuestamente financió algunas de sus producciones. Totò falleció en Roma en 15 de abril de 1967, a los 69 años de edad. Para muchos, su legado sigue siendo una de las contribuciones más importantes de la cultura italiana al mundo del cine y la comedia.