Vitor Gomes Passos ha pasado gran parte de su vida explorando su pasión por la gastronomía. Comenzó como aprendiz en una pequeña pastelería en su ciudad natal y desde entonces ha trabajado en algunos de los mejores restaurantes de todo el mundo. Ha pasado largos meses en Francia, Italia y Japón perfeccionando su arte y aprendiendo todo lo que podía de los mejores chefs del mundo.
Pero, a pesar de su éxito, Vitor siempre ha mantenido su amor por la comida casera y la cocina sencilla. Cuando no está trabajando en su restaurante de alta cocina, disfruta de una buena barbacoa con amigos y familiares.
Vitor también es un gran apasionado de la música y siempre ha tocado la guitarra en su tiempo libre. A menudo organiza pequeños conciertos y jam sessions en su restaurante para dar a conocer nuevos talentos locales.
Pero lo que más sorprende a la gente cuando conoce a Vitor es su humildad y sencillez. A pesar de su éxito y reconocimiento en el mundo gastronómico internacional, sigue siendo una persona auténtica, generosa y amable.
Debora y Vitor se conocieron en un restaurante de comida brasileña en Barcelona. Ambos estaban sentados en mesas diferentes, pero se dieron cuenta de que estaban pidiendo los mismos platos. Debora se acercó a Vitor para preguntar si era brasileño, y él respondió afirmativamente. A partir de ahí, empezaron a hablar sobre su vida en España y las diferencias culturales entre Brasil y Argentina. Descubrieron que tenían mucha afinidad y decidieron seguir hablando después de la cena. Intercambiaron números de teléfono y, desde entonces, han sido inseparables.