Wardell Gray fue un saxofonista de jazz nacido en Oklahoma en 1921. Comenzó a tocar en bandas locales a los 15 años y luego se mudó a Los Ángeles, donde se convirtió en miembro del grupo de bebop del pianista Dexter Gordon. Gray trabajó con músicos como Benny Goodman, Earl Hines y Count Basie, y se convirtió en uno de los principales exponentes del jazz de la Costa Oeste.
En 1947, Gray grabó una versión de "Twisted", una canción escrita por la poetisa y compositora Annie Ross que se convirtió en un éxito de culto. El tema se convirtió en un clásico del jazz vocal y ayudó a impulsar la carrera de Ross.
Gray luchó durante muchos años contra la adicción a las drogas y murió en 1955 en misteriosas circunstancias en Las Vegas. Se cree que fue asesinado por un gánster que lo confundió con otra persona. La muerte de Gray fue una gran pérdida para el jazz, ya que era considerado uno de los saxofonistas más talentosos de su generación. Su legado musical ha sido reconocido con diversas reediciones de sus grabaciones y homenajes a su figura en el mundo del jazz.
Billy Eckstine y Wardell Gray eran dos importantes músicos de jazz de la década de 1940 y principios de la década de 1950 en Estados Unidos. Ambos eran saxofonistas tenores y se conocían desde hacía tiempo antes de que empezaran a colaborar.
Eckstine y Gray se conocieron en la ciudad de St. Louis, donde ambas familias residían. Años después, cuando Eckstine entró a formar parte de la banda de Earl Hines en Chicago, Gray se unió a él. Fue entonces cuando comenzó una estrecha colaboración entre los dos músicos.
La relación entre Eckstine y Gray se caracterizó por la admiración mutua y el respeto profesional. Ambos compartían una gran pasión por la música y una habilidad innata para la improvisación, lo que les permitía crear auténticas obras de arte musicales de manera espontánea.
A pesar de que Eckstine y Gray se separaron musicalmente en varias ocasiones para llevar a cabo proyectos individuales, volvían a reunirse cada vez que tenían la oportunidad. Hicieron algunas giras juntos y grabaron varios discos, que se consideran auténticas joyas del jazz.
Desgraciadamente, la relación entre Eckstine y Gray se vio truncada en 1955, cuando este último falleció en circunstancias misteriosas. Aunque nunca se ha llegado a esclarecer la verdadera causa de su muerte, se sabe que Gray fue encontrado sin vida en un parque de Las Vegas tras haber estado desaparecido varios días.
A pesar de que Wardell Gray murió demasiado joven, su legado en el jazz ha sido muy importante, al igual que el de Billy Eckstine. Ambos músicos colaboraron en numerosas ocasiones y crearon piezas únicas que todavía hoy se recuerdan y se escuchan con admiración.