Wayne McBean es un hombre enigmático y reservado, lo que ha provocado que mucha gente especule sobre quién es en realidad. Pero pocos saben que se desempeña como un exitoso empresario en el sector de la tecnología, especialmente en el desarrollo de aplicaciones móviles. Es conocido entre sus colegas como un hombre visionario y muy ambicioso, que siempre está en busca de nuevos desafíos.
Aunque su dedicación al trabajo es encomiable, Wayne también cuenta con una gran pasión por la música. En sus tiempos libres gusta de tocar la guitarra eléctrica, y su habilidad en las seis cuerdas es casi equiparable a su habilidad para los negocios.
Y aunque muchos creen que vive una vida solitaria, lo cierto es que Wayne tiene una familia que lo apoya en todo momento. Su esposa e hijos son su verdadero motor en la vida, y siempre se asegura de dedicarles el tiempo que merecen.
En definitiva, Wayne McBean es un hombre desconocido para muchos, pero en el fondo es un individuo con una vida plena y en constante movimiento.
Alyssa Milano y Wayne McBean se conocieron en una fiesta privada en Los Ángeles. Alyssa se encontraba charlando con unos amigos cuando vio a Wayne de pie en una esquina. Se sintió atraída por su aspecto tranquilo y reservado, y decidió acercarse a él.
Después de una breve introducción, comenzaron a hablar y descubrieron que compartían muchos intereses. Hablaron sobre música, arte y viajes. Alyssa se sintió inmediatamente a gusto con Wayne, ya que encontró en él un compañero con el que podía tener conversaciones interesantes.
Pronto descubrieron que también tenían en común una pasión por el activismo social. Los dos habían trabajado en proyectos comunitarios y se dieron cuenta de que compartían una visión similar sobre la responsabilidad social.
A medida que la noche avanzaba, el tiempo parecía volar. Se dieron cuenta de que habían estado hablando durante horas y que los demás invitados se habían retirado en silencio. Alyssa y Wayne se despidieron con la promesa de mantenerse en contacto y se fueron a casa con una sensación de felicidad y emoción por haber encontrado a alguien con quien compartían tanto en común.