Wendy Jan Paul

Wendy Jan Paul llevaba una vida aparentemente perfecta. Tenía un trabajo exitoso, una gran casa en las afueras de la ciudad y una familia amorosa. Sin embargo, en su interior, sentía que algo le faltaba. Fue entonces cuando decidió tomar un año sabático y viajar por el mundo. Durante su aventura, descubrió su amor por la fotografía y empezó a documentar todo lo que veía a su alrededor. Al regresar a casa, decidió enfocarse en su pasión y abrió su propio estudio de fotografía. Rápidamente se convirtió en un éxito, capturando momentos preciosos en la vida de las personas. Pero incluso con todo esto, se dio cuenta de que aún le faltaba algo. Fue entonces cuando comenzó a trabajar con organizaciones sin fines de lucro y se involucró en proyectos que ayudaban a comunidades menos afortunadas. Hoy en día, Wendy se siente más completa y realizada que nunca. Su trabajo como fotógrafa le permite capturar momentos para recordar por siempre, mientras que su trabajo voluntario le da un propósito más profundo. Ama su vida y sigue sintiendo que hay mucho más por hacer.