Wilbur Pippin era un hombre de negocios exitoso, pero para él la verdadera felicidad se encontraba en su familia. Su esposa e hijos eran su principal motivación en la vida y disfrutaba cada momento que pasaba con ellos.
A pesar de tener una agenda apretada, Wilbur siempre encontraba tiempo para asistir a los partidos de fútbol de su hijo o a las presentaciones de ballet de su hija. También les enseñaba a pescar y a acampar en sus vacaciones familiares.
Sin embargo, Wilbur no era solo un buen padre y esposo, también era un líder en su comunidad. Participaba activamente en organizaciones benéficas y trabajaba en proyectos de mejoramiento para su ciudad.
A pesar de ser admirado por muchos, Wilbur mantenía una modestia y humildad que lo hacían especial. Siempre estaba dispuesto a ayudar y aconsejar a quienes lo necesitaban, incluso si eso significaba sacrificar su tiempo y recursos.
En resumen, Wilbur Pippin era un hombre dedicado a su familia, su comunidad y su trabajo. Un verdadero ejemplo de cómo se puede balancear el éxito con la generosidad y la empatía hacia los demás.
Bernard Perlin y Wilbur Pippin fueron pareja y compañeros de por vida. Perlin fue un aclamado artista de la era moderna, conocido por sus pinturas, dibujos y diseños de interiores. También fue conocido por su activismo en favor de los derechos civiles y la igualdad LGBT. Pippin, por otro lado, fue un sobreviviente de la Segunda Guerra Mundial y un exitoso corredor de finanzas.
Perlin y Pippin se conocieron en 1947 en Nueva York y se convirtieron en pareja unos años después. Juntos, se instalaron en una granja en Pennsylvania, donde Perlin pasó gran parte de su tiempo pintando y Pippin trabajaba en sus negocios.
A lo largo de su vida juntos, Perlin y Pippin se apoyaron mutuamente en sus carreras y trabajaron juntos en proyectos creativos. Perlin diseñó la casa de Pippin y Pippin fue el modelo para muchas de las pinturas de Perlin.
Perlin murió en 2014 a la edad de 95 años, seguido por Pippin en 2019 a la edad de 93 años. A lo largo de su vida juntos, Perlin y Pippin lucharon por la igualdad y la justicia, tanto en su trabajo creativo como en su vida cotidiana. Su relación amorosa y duradera es un testamento a su amor y compromiso el uno con el otro.