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William McGann

William McGann

William McGann (1896-1977) fue un director de cine estadounidense que trabajó en Hollywood durante las décadas de 1920 a 1950. Comenzó su carrera como asistente de director y director de segunda unidad en films mudos y luego se especializó en películas de aventuras y de gánsteres. Entre sus trabajos más destacados se encuentran "King of the Underworld" (1939) con Humphrey Bogart, "The Invisible Man Returns" (1940) y "Sleepers West" (1941).

Durante la Segunda Guerra Mundial, McGann se unió a la Marina de los Estados Unidos y sirvió como comandante de la unidad de cine de la Flota del Pacífico. Después de la guerra, volvió a Hollywood y dirigió varias películas más antes de retirarse en 1956.

Además de su trabajo como director, McGann también fue guionista y productor ocasionalmente. También fue miembro fundador de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, y sirvió en varios comités de la organización. McGann murió en 1977 en Los Ángeles, California.

Relaciones amorosas

Mae Madison

Mae Madison

Esposa de William McGann

1932

Mae-Madison y William-McGann se conocieron en una feria de ciencias en la universidad. Ambos estaban realizando un proyecto sobre la mejora del rendimiento escolar en alumnos de primaria. Mae-Madison era una estudiante de psicología y William-McGann, de ingeniería.

Mientras ambos compartían ideas para mejorar el proyecto, notaron que tenían una gran conexión y que trabajaban bien juntos. Decidieron unir esfuerzos y trabajar en el proyecto juntos.

Durante los siguientes meses, Mae-Madison y William-McGann se vieron con regularidad para trabajar en el proyecto. A medida que pasaba el tiempo, se dieron cuenta de que no solo eran buenos compañeros de trabajo, sino que también compartían muchas aficiones y hobbies en común.

Finalmente, terminaron el proyecto con éxito y presentaron sus resultados en la feria de ciencias. El proyecto recibió una calificación sobresaliente y, después de la presentación, Mae-Madison y William-McGann siguieron hablando y conociéndose mejor. La química entre ellos era evidente y, antes de que se dieran cuenta, se habían convertido en una pareja inseparable. Así fue como se conocieron Mae-Madison y William-McGann.