Woody Long era un hombre de negocios exitoso y apasionado por la música. Se levantaba temprano cada mañana para hacer yoga y meditación antes de comenzar su día laboral. Durante su tiempo libre, tocaba guitarra y componía canciones, a veces actuando en pequeños bares y clubes en su tiempo libre. También era un ávido corredor y participaba en maratones con regularidad, en un esfuerzo por mantenerse en forma y saludable. Era conocido por su ética de trabajo y su capacidad para liderar equipos de negocios, y aunque disfrutaba de su trabajo, siempre se aseguraba de tener tiempo para dedicar a su familia y amigos. Había pasado por algunas dificultades en su vida, pero nunca perdió su optimismo ni su deseo de mejorar tanto a sí mismo como a los demás.
Celeste y Woody-Long se conocieron inesperadamente en una cafetería llena de gente. Celeste estaba esperando su orden mientras Woody-Long luchaba por encontrar un asiento vacío en medio del bullicio. Finalmente, Celeste se ofreció amablemente a compartir su mesa con él.
Comenzaron a hablar y, pronto, descubrieron que tenían muchos intereses en común. Woody-Long tenía una pasión por la música, toca la guitarra y compone canciones, mientras que Celeste es una talentosa cantante.
Debido a esta conexión, Woody-Long le preguntó si quería unirse a su banda. Celeste aceptó con entusiasmo, y desde entonces han sido inseparables tanto en el escenario como en la vida cotidiana.
Así es como se conocieron Celeste y Woody-Long, una simple casualidad que los llevó a una amistad duradera y una carrera musical conjunta.
Sandra-Scream y Woody-Long se conocieron en un bar de rock pegajoso en el centro de la ciudad. Ambos estaban allí para disfrutar de la música y relajarse después de un día agitado en el trabajo. Sin embargo, fue Sandra quien notó primero a Woody en la multitud, causando un efecto instantáneo en ella. No podía quitarle los ojos de encima, pero seguía luchando por encontrar el valor para iniciar una conversación.
Finalmente, la oportunidad llegó cuando la banda decidió tomar un descanso. Sin pensarlo dos veces, Sandra se acercó a Woody y le preguntó qué pensaba de la actuación hasta ese momento. Afortunadamente, Woody respondió con una sonrisa amistosa y una conversación comenzó naturalmente.
Durante la próxima hora, hablaron sobre sus intereses compartidos en la música y en el cine de terror. Descubrieron que tenían mucho en común y que pensaban en una frecuencia similar. A medida que la noche avanzaba, las risas y las charlas cómodas continuaron fluyendo, culminando en el intercambio de números de teléfono y una promesa de ver la próxima banda juntos.
Desde ese momento, Sandra y Woody se hicieron inseparables y se convirtieron en una pareja de rock and roll letal. Siempre se pueden encontrar en conciertos y festivales de música, disfrutando del sonido del rock que unió sus vidas.