Yelena Golyanova nació en 1960 en la Unión Soviética y creció en una familia disidente. Su padre, Yuri Golyanov, fue encarcelado varias veces por sus actividades contrarias al régimen soviético. En la década de 1980, Yelena se convirtió en activista política y comenzó a trabajar con el grupo de derechos humanos Memorial. En 1987, fue arrestada por distribuir literatura disidente y pasó varios meses en prisión. Después de su liberación, Yelena continuó su trabajo activista y se convirtió en una de las fundadoras del grupo de derechos humanos Helsinki Citizens' Assembly en Moscú. También trabajó en la coalición de derechos humanos Agora y fue miembro de la junta de la organización de derechos de los presos Gulag. Durante su trabajo en defensa de los derechos humanos, Yelena enfrentó acoso y amenazas de las autoridades rusas. En 2015, fue arrestada y acusada de intentar "derrocar" al gobierno ruso. Fue condenada a siete años de prisión, pero fue liberada en 2018 después de una campaña internacional de derechos humanos que pedía su liberación. Yelena Golyanova falleció en septiembre de 2021 a los 61 años debido a una enfermedad. Su trabajo fue reconocido a nivel internacional y se la considera una defensora valiente de los derechos humanos en Rusia.