Yvonne Doughty fue una artista estadounidense nacida en 1951 en el estado de Maine. Estudió en la Universidad de Maine y posteriormente en la Universidad de Nueva York, donde obtuvo su MFA en escultura. Desde entonces, ha trabajado en una variedad de medios, incluyendo pintura, dibujo y fotografía, pero es más conocida por sus instalaciones y esculturas textiles.
A lo largo de su carrera, Doughty ha expuesto su trabajo en numerosas galerías y museos de todo Estados Unidos. En 2019, fue honrada con una exposición individual en la Galería de Arte de Portland, que incluyó una retrospectiva de su trabajo de los últimos 20 años.
La obra de Doughty se caracteriza por su uso de materiales tradicionales y técnicas de costura para crear piezas que evocan tanto el pasado como el presente. A menudo, sus esculturas textiles se basan en objetos cotidianos, como ropa y utensilios de cocina, que transforma en objetos artísticos. Su trabajo ha sido descrito como una mezcla de lo familiar y lo extraño, y se centra en cuestiones de género, identidad y memoria.
Doughty falleció en 2020, a los 68 años, dejando un legado de trabajo innovador y altamente respetado en el campo de las artes visuales.
Yvonne Doughty Born-2004 y Lafayette Utter se conocieron en una zapatería cuando ambos estaban buscando un par de botas para el invierno. Mientras Yvonne estaba probándose un par, Lafayette le preguntó su opinión sobre el par de botas que estaba considerando. Comenzaron a conversar y descubrieron que tenían pasatiempos similares, como hacer senderismo y leer. Lafayette decidió invitar a Yvonne a unirse a su grupo de senderismo, donde terminaron desarrollando una amistad fuerte. Hoy, siguen siendo amigos cercanos y disfrutan de sus actividades juntos.
Un día soleado en el parque, Yvonne-Doughty-Born-2004 estaba sentada en un banco leyendo un libro. De repente, su mascota, un pequeño perro llamado Max, se escapó de su correa y comenzó a correr por el parque. Yvonne corrió detrás de él, intentando alcanzarlo. Max finalmente se detuvo en un lugar donde estaba un grupo de niños jugando.
Uno de los niños, Jess-Barker, estaba jugando con una pelota y Max corrió y le quitó la pelota de las manos. Jess y Yvonne comenzaron a hablar mientras se reían del comportamiento travieso de Max. Descubrieron rápidamente que ambos tenían una pasión por la música y comenzaron a hablar sobre sus bandas favoritas.
Después de intercambiar algunas bromas y hacer planes para volver a encontrarse en el parque, Yvonne y Jess se despiden. Desde ese día, se convirtieron en buenos amigos, compartiendo su amor por la música y disfrutando de su tiempo juntos en el parque.