Eugenio González de Armas fue un abogado y político español nacido en 1913 y fallecido en 2006. Tras licenciarse en Derecho en la Universidad de Valladolid, comenzó su carrera política en la década de 1930 como miembro de la Falange Española. Durante la Guerra Civil, combatió en el bando franquista y fue miembro de la Legión Cóndor alemana.
Tras el fin de la guerra, Eugenio González fue nombrado gobernador civil de la provincia de Huelva y más tarde de Vizcaya, donde tuvo que hacer frente a la lucha armada de ETA. En 1951 fue nombrado ministro-secretario general del Movimiento Nacional, cargo que ocupó hasta 1956.
En los años 60, González fue uno de los fundadores del Opus Dei en España y se convirtió en su primer presidente. En 1965 fue nombrado alcalde de Madrid por el régimen franquista y lo ocupó hasta 1973. Durante su mandato se llevaron a cabo importantes obras públicas, como la construcción de la M-30 y la reforma de la Plaza Mayor.
Tras la muerte de Franco, Eugenio González se retiró de la política y se dedicó a la docencia y la escritura. Falleció en 2006 a los 93 años.
Eugenio González fue el segundo esposo de la actriz mexicana Silvia Derbez. La pareja se conoció en la década de 1950 mientras trabajaban juntos en producciones teatrales. Después de algunos años de estar juntos, se casaron en 1957.
Durante su matrimonio, Silvia y Eugenio protagonizaron juntos varias películas y programas de televisión. También formaron una familia, tuvieron cinco hijos juntos, entre ellos el actor y comediante Eugenio Derbez.
Sin embargo, la relación llegó a su fin en 1971, cuando Silvia Derbez murió en un accidente automovilístico. La noticia fue un gran golpe para la familia y dejó a Eugenio y a sus hijos con una gran tristeza.
A pesar de su separación, Eugenio González fue un gran co-padre para sus hijos junto con Derbez. Mantuvo su compromiso y devoción por sus hijos hasta su muerte en 2001.
En general, la relación entre Eugenio González y Silvia Derbez se caracterizó por su amor mutuo y la colaboración artística que los llevó a consagrarse como dos grandes figuras de la industria del entretenimiento en México.