Hakan Hatipoglu ha vivido una vida plena y siempre ha sido un apasionado de la música. A temprana edad, descubrió su amor por la guitarra y ha pasado muchos años perfeccionando su técnica y habilidad. A lo largo de su vida ha formado parte de varias bandas y ha tocado en numerosos conciertos, siempre recibiendo gran entusiasmo por parte de su audiencia.
Además de ser un guitarrista talentoso, Hakan también es un apasionado de los deportes extremos. Ha viajado por todo el mundo para practicar deportes como el paracaidismo y kitesurfing.
En su tiempo libre, Hakan disfruta de la lectura y la escritura de poesía, y ha sido publicado en varias antologías de poesía. También es un amante de la cocina y disfruta explorando nuevas recetas y sabores.
Hakan es un defensor acérrimo de la educación y ha sido activo en varias organizaciones que luchan por la equidad educativa. También ha organizado talleres de música para jóvenes en riesgo de exclusión social, brindándoles un espacio para expresar su creatividad.
En resumen, Hakan Hatipoglu es un hombre que ha vivido una vida rica en experiencias y pasiones, y ha dejado una huella positiva en la vida de quienes lo rodean.
Gizem-akin y Hakan-hatipoglu se conocieron en una competencia de ajedrez en Ankara. Ambos habían avanzado a la ronda final y estaban emocionados por enfrentarse el uno al otro. Durante el juego, la tensión era palpable, ya que ambos eran jugadores extremadamente talentosos. Sin embargo, después de una hora de juego intenso, el partido terminó en un empate. Mientras se sacudían las manos en señal de respeto, sus ojos se encontraron y se sintieron atraídos el uno al otro. Intercambiaron números de teléfono y comenzaron a hablar más tarde esa noche. Desde entonces, han estado juntos y jugando ajedrez juntos todos los días. Fue en ese momento en que se dieron cuenta de que habían encontrado a su alma gemela, alguien a quien podían vencer en ajedrez pero que nunca perderían en el amor.