María de Módena fue una princesa italiana nacida el 5 de octubre de 1658 en el ducado de Módena. A los 16 años se casó con Jacobo, duque de York, hermano del rey inglés Carlos II. Posteriormente, Jacobo se convirtió en rey de Inglaterra como Jacobo II, y María se convirtió en reina consorte.
María tuvo muchas dificultades para tener hijos y, después de varios abortos espontáneos, finalmente dio a luz a un hijo en 1688. Este niño, que se convirtió en Jacobo Francisco Eduardo Estuardo, sería el último rey católico de Inglaterra.
El reinado de Jacobo II estuvo marcado por el descontento político y religioso, y María fue objeto de rumores y acusaciones de conspiración debido a su religión católica. En 1688, la Revolución Gloriosa llevó a Jacobo II a huir del país, y María lo siguió al exilio en Francia, donde murió el 7 de mayo de 1718.
James II de Inglaterra y Mary of Modena eran esposos y miembros de la Casa de Estuardo. Se casaron en 1673 y tuvieron varios hijos juntos, incluido James Francis Edward, quien se convertiría en Jacobo III de Inglaterra y Escocia.
La relación entre James y Mary ha sido objeto de debate y especulación a lo largo de los años. Algunos historiadores han sugerido que James era infiel a su esposa y tuvo varias amantes, mientras que otros han argumentado que era un esposo devoto.
A pesar de estos rumores, James y Mary parecían tener una relación cercana y amorosa. James fue descrito como un esposo protector y atento, y Mary era conocida por su belleza y encanto.
Sin embargo, la relación entre James y Mary estuvo marcada por la tensión política y religiosa de la época. James era católico y trató de promover la libertad religiosa en Inglaterra, lo que provocó la oposición de muchos protestantes. La llegada de un heredero católico al trono también aumentó las tensiones.
En última instancia, la relación entre James y Mary se vio afectada por los sucesos políticos de la época. Después de que James fuera depuesto en la Revolución Gloriosa de 1688, Mary lo acompañó al exilio en Francia. Allí, la pareja vivió separada por largos períodos de tiempo debido a las obligaciones políticas de James.
En general, la relación entre James II de Inglaterra y Mary of Modena fue una de amor y apoyo mutuo, aunque se vio afectada por las tensiones políticas y religiosas de la época.