Emma-Lavinia Gifford fue la esposa de Thomas Hardy, uno de los más famosos escritores ingleses del siglo XIX y principios del XX. Emma-Lavinia y Thomas se conocieron en 1870 cuando ella estudiaba música en la ciudad natal de Hardy, Dorchester. Emma-Lavinia se convirtió en su esposa en 1874 y juntos vivieron en varias casas en Inglaterra, incluyendo la casa Max Gate en Dorchester. Aunque la pareja estaba casada por más de 40 años, su relación fue a menudo difícil. En particular, Emma-Lavinia se sentía ignorada y frustrada por la dedicación de Hardy a su carrera literaria. En 1895, Emma-Lavinia pidió a Hardy que dejara de escribir y se centrara en su matrimonio, pero Hardy continuó escribiendo y publicando. Esta tensión en su matrimonio se reflejó en algunos de los personajes femeninos en novelas de Hardy como "Jude el oscuro" y "Tess de los d'Urbervilles". Emma-Lavinia sufría de mala salud por muchos años y murió en 1912, a la edad de 64 años. Hardy quedó muy afectado por su muerte y escribió varios poemas en homenaje a su esposa. Aunque su relación tuvo sus altibajos, Hardy y Emma-Lavinia compartieron una vida juntos y una conexión que influenció su obra de manera significativa.
