Ursula Katharina von Altenbockum fue la amante y el gran amor del príncipe elector de Sajonia y rey de Polonia, Augusto II el Fuerte. Se conocieron en Viena en 1695, cuando Augusto II era un joven aristócrata y Ursula Katharina era una dama de la corte de la emperatriz vienesa. La relación entre ambos fue muy intensa y duró más de 30 años, incluso después de que Augusto II se casara con la princesa cristiana Eberhardine de Brandeburgo-Bayreuth en 1693. Ursula Katharina tuvo dos hijos con Augusto II, una hija en 1707 y un hijo en 1711, ambos llevan el apellido von Teschenberg. Augusto II estableció a Ursula Katharina en su propio palacio en Teschenberg, cerca de Dresde, donde ella vivió rodeada de lujo y confort. Se dice que Augusto II le concedió a Ursula Katharina el título de Condesa de Teschenberg, lo que le dio una posición social y una estabilidad financiera. Después de la muerte de Ursula Katharina en 1733, Augusto II quedó tan afectado que ordenó la construcción de una cripta en la iglesia de Santa Ana en Dresde, donde fueron enterrados Ursula Katharina y sus hijos. La cripta se convirtió en un lugar de peregrinación para las muchas amantes de Augusto II, que también fueron enterradas allí. En general, la relación entre Ursula Katharina y Augusto II fue apasionada y duradera, y su romance se considera una de las historias de amor más famosas de la historia de Europa.
